Ahora más que nunca, celebremos el Día de Europa

Todos los 9 de mayo celebramos los europeos el Día de Europa. Es un mero gesto, pero es que los gestos son la antesala de los hechos. Sin símbolos propios, sin héroes, mitos o leyendas comunes, es imposible edificar una identidad europea. Si no somos capaces de recordar y transmitir a nuestros hijos, que los Padres Fundadores de esta Europa unida, tras dos guerras terribles, nos comprometieron con la paz y la convivencia, difícilmente vamos a encarar el futuro con éxito.

En el “reñidero español”, pido la voz y la palabra.

Busquemos ese Gran Acuerdo para el que, humildemente, y como senador autonómico y representante por tanto del conjunto del Parlamento Foral, me ofrezco como catalizador y correa de transmisión hacia las instituciones estatales. Soy el senador autonómico de Navarra elegido por la mayoría de nuestro Parlamento, pero me dirijo a todas las fuerzas y especialmente a quienes no me votaron. Es verdad, soy de Geroa Bai; pero en esta batalla sanitaria y económica ni mi propia organización política me perdonaría si no actuara bajo un único ideal: Navarra y la Humanidad.